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Tengo Miedo

La silueta de una espectral figura
vigila cada respirar de mi ser

¡Tengo miedo!

La silueta escondida de una espectral figura
vigila cada respirar de mi ser.

¡Tengo miedo!

Ese fantasma invisible pero tangible,
ese hedor putrefacto de la muerte,
ese calar de huesos con ese gélido aliento
que atraviesa mi cerebro;
que apuñala mi corazón.

¡Tengo miedo!

Veo mi rostro en el espejo y no soy yo.
Veo a otro.
Alguien que muestra en su mirar, una tristeza profunda,
de hace mucho tiempo;
de hace muchas lunas;
de hace muchos siglos, como si hubiera nacido con ella.
Una pena que me hace llorar y
entre los ecos de mis sosollos, algo también llora conmigo.
No es un llanto de dolor como el mío.
Es un llanto de sufrimiento indescriptible.

¡Tengo miedo!

Sólo las calles solitarias de mi pesar,
son mudos testigos de este momento,
de esta espectral silueta que escondida,
vigila cada respirar, cada paso,
cada latir.
¡Si! ese fantasma de tu recuerdo....
que ha robado el calor de mi espíritu,
la vida de mi alma.

Por favor, escucha: ¡Tengo miedo!

Email

La La luz del monitor ilumina la oscuridad de la esperanza.
El ruido del tecleo ilumina los recovecos
secretos de los gnomos ancestrales.

El silencio de la electricidad escurre entre mis oídos
llegando de muy lejos, atravesando ese delgado
hilo entre los mortales y entre las divinidades.
Sólo escucho caer la ceniza de la desesperación
al fondo del pozo de mi corazón.

Espero...

¡Si...... ahí está!: tu correo.

Como polilla que se acerca peligrosamente al fuego
abro rápidamente el mensaje.
El temblor de mis manos y el trepidar de mis sensaciones
inundan la penumbra de la habitación.

Leo frenéticamente cada línea que aparece en la pantalla.
Bebo sorbo a sorbo los significados más especiales de tu ser.
Me emborracho con verbos, sujetos, predicados.
Me dirijo al cielo con los adjetivos, los puntos y las comas.

Mi rostro se ilumina ante tus palabras.
Cierro mis ojos y recuerdo de nuevo el texto.
Mi cerebro narcotizado de esperanzas e ilusiones
comienza a divertirse entre la imaginación y
lívidos despiertos. Canta al ritmo de mi respirar.
Baila al compás de tu dulce voz... te veo ahora.

Esa espejismo desencadena la presión sanguínea
que hace estallar en mil pedazos mi corazón,
las lagrimas, brotan de lo más profundo del inconsciente,
las alegrías danzan con las hadas del amor.
Tu imagen besa mi frente.

¡Estoy enamorado de ti y no lo puedo negar!
Ahora lo se.... Adoro éste email.

Hoy te vi Pasar

Hoy te vi pasar.
Pero no como otros días....¡no!
Hoy te vi como un flor de primavera:
radiante, de mil colores, de mil olores y dulces aromas.

¡Si! Lo confieso: hoy te vi pasar.
Te vi con tu hermoso cabello suelto a los caprichos del viento.
Con tu vestido Azul, con tu sombrero de paja.
Con tu brillante sonrisa.....mágica sonrisa.

¡Si! hoy te vi pasar... y entre tus manos te llevaste mi corazón,
entre tus bellos ojos de cielo, te llevaste mi amor.

¡Si! hoy te vi pasar.... y contigo también se fue mi ilusión.
Se ha ido, porque no desea volver a verte jamás.

No puedo seguir así.
¡No puedo! porque: hoy te vi pasar.
Pero no como otros días... ¡no!
Hoy te vi pasar, con otro.
Y ese otro no era yo.
Ese otro era tu amado.

¡Si! hoy te vi pasar....

Siempre junto a Ti

Estoy tan acostumbrado a ti,
a tus caprichos, a tus alegrías,
a tus angustias, a tus enojos.

Estoy tan acostumbrado a ti
qué no se que haría yo sino estuvieras a mi lado.
Te amo y cuando te extraño te amo aún más.
Sé que de ti estoy enamorado.

Ahora estoy convencido plenamente de que no quiero
vivir contigo... ¡no!. Quiero morir contigo.
Quiero quedarme en tu regazo,
tomarte de tus manos y caminar juntos,
el sendero del amor eterno.

Jurarnos amarnos una y otra ves,
hasta el fin de los siglos,
hasta el fin de los mundos,
hasta el fin de los universos,
hasta el fin...
Cada día será diferente.
Cada día será un día especial.
Cada día será un día nuevo.
Cada día será un nuevo amor.

¡Si tan sólo supieras comprender este suplicio anhelante!
¡Si tan sólo supieras cuanto te amo!

Te amo porque eres la mujer de mi vida,
la costilla que Dios me robó,
la mitad que me faltaba.

Ahora sólo sé que te amo más que a mi mismo,
más que a todas las cosas.
Y si amarte es pecado, que me condene el Creador,
porque he pecado imperdonablemente: Te quiero.
Te amo aún más que a Él mismo.

Pero sólo le pido al hermano del hombre, que
con su infinita misericordia, con su infinita
bondad y con su infinito perdón; que me conceda
un último deseo:

Permanecer Siempre Junto a Ti.

Melancolía

Desde hace mucho tiempo ya
mis ojos se han secado de tanto llorar.
Hoy sólo tengo un amargo recuerdo,
el dolo no puedo soportarlo más.

Alegres memorias, tristes memorias.
Inmutables pensamientos,
punzantes laceraciones.
Imborrables sufrimientos atormentan mi alma muerta.
Sólo ésta melancolía llena mi vida de resentimientos.

¿Existe alguien que pueda resistir tanto dolor en el alma?

El silencio que se apodera de la habitación,
es la marcha fúnebre de tus recuerdos,
una diabólica melodía.

Quizás... Sólo ahora, me estoy dando cuenta
que muerto estoy en vida.